Terapia para adultos
Agresividad
La agresividad es un estado emocional que consiste en sentimientos de odio y deseos de dañar a otra persona, animal u objeto.
La agresión es cualquier forma de conducta que pretende herir física y o psicológicamente a alguien.
Los objetivos principales de la agresividad son el dañar al otro/a, coerción para influir en la conducta de otra persona, el poder y dominio dentro de un sistema familiar o social; y la reputación e imagen tal como ciertos tipos de liderazgo dentro de un grupo social.
Existen además factores biológicos, psicológicos y ambientales que influyen en la agresividad y en la manera de expresarla.
La agresividad es un factor del comportamiento normal puesto en acción ante determinados estados para responder a necesidades vitales, que protegen la supervivencia de la persona y de la especie, sin que sea necesaria la destrucción del adversario.
El problema viene cuando esta agresividad se vuelve patológica.
Algunos teóricos como Kaplan & Sadolk describieron la agresividad patológica como autodestructiva, consecuencia de un problema emocional no resuelto, reacción no realista y que no resuelve problemas.
Aquellas personas con mayor riesgo son aquellas personalidades emocionalmente reactivas con poca tolerancia a las condiciones sociales estresantes, con escasas relaciones sociales y menor cobertura social, ciertos tipos de subculturas especificas o bien haber sufrido situaciones altamente traumáticas que no se han elaborado e integrado de manera adecuada, junto con otros factores como el abuso de alcohol o drogas.
La agresividad puede trabajarse y comprenderse mejor para poder canalizarla de manera más adaptativa mediante técnicas y estrategias psicoterapéuticas.
